El momento ha llegado. Lionel Messi es libre para negociar con el club que desee: a seis meses de que expire su contrato con el Barcelona, el seis veces ganador del Balón de Oro está autorizado a negociar con otros clubes a partir de este 1 de enero en vista de una eventual salida al término del actual curso. ¿Cuál será el futuro del argentino?
Mientras que el ‘mercato’ de enero se abre este fin de semana en Europa y el lunes en España, las próximas semanas se anuncian determinantes para el Barça y para el futuro de la superestrella culé (33 años), quien ya mostró hace unos meses su deseo de cambiar de aires y al que la normativa de la FIFA ya concede autorización legal para mantener conversaciones con cualquier club con vistas a negociar un nuevo contrato sin tener que pagar por el traspaso a partir del 1 de julio.
El club catalán elegirá a su nuevo presidente el 24 de enero, y la nueva directiva tendrá como una de las primeras misiones convencer a Messi de quedarse en Barcelona.
Afectado por la falta de estabilidad en el club, por la crisis desde hace más de un año, con una sucesión de entrenadores (tres en un año) y resultados decepcionantes como la histórica humillación sufrida en agosto pasado contra el Bayern de Múnich en Liga de Campeones (8-2), Messi decidió dejar el club el pasado mes de agosto… pero finalmente se quedó, obligado por su contrato ante la negativa a abrirle la puerta del presidente Josep Maria Bartomeu, ya dimitido.
Leo “no ha decidido aún”. Pero el jugador, que dejó su ciudad de Rosario (Argentina) con 13 años en 2000 para llegar a La Masía, el centro de formación del Barça, confesó el domingo en la Sexta que será “complicado devolver al club al nivel en el que estaba”.
Algo poco tranquilizador. “¿Cómo no va a querer Messi irse con este equipo?”, se interrogaba el periódico deportivo Marca, el 19 de diciembre, tras la pobre actuación del club catalán ante el Valencia (2-2) en Liga.
Presente en las gradas el martes, Messi se mostró cabizbajo luego del empate contra el Eibar en el Camp Nou (1-1).
Neymar y el PSG, en la ‘pole’
Pero pese a la posibilidad de hacerse con sus servicios desde julio sin pago de cláusula, son pocos los clubes con el músculo económico para afrontar el salario del argentino.
A día de hoy, el candidato más serio parece ser el París Saint-Germain. El club francés, sustentado por sus ricos propietarios cataríes, es uno de los pocos en poder plantearse la posibilidad de fichar a Leo Messi.
Messi estará en la capital francesa el 16 de febrero con motivo del partido de octavos de final de la Liga de Campeones PSG-Barça, tres años después de la famosa ‘remontada’ de marzo de 2017 (6-1).
Con un salario bruto mensual de 8,3 millones de euros (10,09 millones de dólares) al mes según L’Equipe (86,9 millones de euros brutos al año, 105,6 millones de dólares), Messi es el futbolista mejor pagado del planeta, muy por delante de su eterno rival Cristiano Ronaldo en la Juventus de Turín (4,5 millones de euros brutos al mes, 5,4 millones de dólares), y de las estrellas del PSG Neymar (sobre 3 millones de euros brutos al mes, 3,6 millones de dólares) y Kylian Mbappé (sobre dos millones de euros brutos al mes, sobre 2,4 millones de dólares).
Además del argumento económico, existen motivos personales: al fichar por el PSG, Messi podría volver a jugar junto a su amigo Neymar, quien el 2 de diciembre afirmó su deseo de “disfrutar de nuevo junto a él en el césped”… y “¿por qué no este año?”, añadió el brasileño, cómplice de Messi en el Camp Nou entre 2013 y 2017.
“No es momento de hablar de ello”, sentenció hace unas semanas el director deportivo del PSG, Leonardo.
¿Y el City de Agüero?
Otro candidato de peso, cuyo nombre ya sonó hace unos meses, es el Manchester City.
El club inglés, propiedad de la familia real de Abu Dabi, cuenta también con argumentos económicos para atraer al argentino.
La Premier League es además el único campeonato europeo que sigue con desembolsos importantes a pesar de la pandemia de coronavirus y el confinamiento que tanto sacudió las arcas de los clubes.
Los ‘Citizens’ también cuentan con otro argumento sentimental: el delantero Sergio Agüero, compatriota y amigo de Messi.
¿Qué camino la estrella azulgrana? El tiempo lo dirá, pero Messi ya es dueño de su destino.