El lanzador Yunesky Maya tiene 39 años de edad. Le dicen El Guerrero pues su espíritu se mantiene bien alto al momento de competir en el terreno de juego.
El cubano reside en Miami durante el verano y viene al país a participar en la pelota invernal. Estará en su cuarta campaña seguida con las Aguilas Cibaeñas, y en los tres últimos campeonatos ha sido campeón de Lidom, aunque con distintos clubes.
Esta última es una circunstancia maravillosa que comparte con el dominicano Junior Lake. Los dos han estado en los tres últimos equipos campeones, en uno con su propio club, en otros dos como refuerzos. Maya lo hizo en 2017-18 jugando para su club Aguilas Cibaeñas, y luego ha sido captado por Estrellas Orientales en 2018-19 y con los Toros fue ganado el torneo pasado.
Lake fue refuerzo de las Aguilas en el citado torneo, luego fue campeón con su equipo verde, y el torneo 2019-20 también fue refuerzo de los Toros.
Sus inicios
La historia de Maya es espectacular. Empezó en 2003 en el terreno de juego cuando se incorporó a la pelota cubana con Pinar de Río. Allí durante 8 años compiló marca de 48-29, siendo uno de los mejores pitchers de la liga en dicho período.
Estuvo con la selección cubana en el clásico mundial del 2006, el primer evento de esta naturaleza, en Copas Intercontinentales, en Copas del Mundo, en Juegos olímpicos. Dos veces integró el seccionado nacional en el clásico pues repitió en 2009. También estuvo en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Cartagena,Colombia, en 2006.
Pero, a raíz de las Olimpiadas de 2008 llegó un serio problemas entre Maya y la Federación de Beisbol de Cuba. “Simplemente para ese tiempo yo seguía siendo uno de los tres mejores pitchers de Cuba y me dejaron fuera de la selección. Protesté y eso me costó una suspensión temporal”.
Las cosas se arreglaron pues fue parte de la selección para el Clásico del 2009. Sin embargo, ya no era lo mismo, y el corazón le latía rápído y en otro sentido. Ya estaba muy de moda la deserción de peloteros cubanos, y esa chispa se encendió en Maya.
Incertidumbre
“Un día salí con otras dos personas en un pequeño bote, nos descubrieron, tuvimos que evadir mucho y en esos afanes la gasolina se terminó. Entonces, nos quedamos a la deriva. Pasamos mucha hambre y mucha sed, hasta que al quinto día encontramos tierra, una pequeña isla llamada Turcas y Caicos, cerca de Venezuela”.
Allí estuvo Maya por casi una semana. Empezaron los contactos con Santo Domingo, en específico con el agente Edgar Mercedes, quien ya había tenido relaciones con posibles desertores cubanos.
“Edgar me trajo aquí en un avión vía Puerto Plata, nos quedamos en Santiago 9 meses, esperando que el Departamento de Estado de Estados Unidos diera permiso para yo firmar con algún equipo de Grandes Ligas”, narra Maya, en una entrevista al programa La Semana Deportiva (CDN Deportes) este pasado domingo. (Más adelante, el propio Mercedes sería protagonista de una travesía aguerrida del jardinero Yoenis Cespedes, quien también fue traído al país, pero en un bote, y luego firmó con los Atléticos de Oakland).
Maya encontraría su hogar en los Nacionales de Washington, con quienes firmó por 4 años y US$6.5 millones. Eso sucedió en julio del 2010, luego iría a menores ese mismo mes, y en septiembre fue subido a los Nacionales. Habían pasado solo dos meses de su firma y tenia 28 años de edad.
“Debuté el 7 de septiembre contra los Mets y supongo que estaba nervioso. En el primer inning recibi jonrón de tres carreras de Ike Davis. Luego me las arreglé y pudo resolver por espacio de 5.1 entradas”,recuerda el lanzador cubano. .
Sin embargo, su paso por las mayores no fue bueno. En los siguientes años estuvo más en las menores , cosechando buenos números, pero no le dieron suficientes oportunidades en Washington. Entre clases de novatos, A, AA y AAA tuvo marca de 29-35.
Luego de tres años con los Nacionales tuvo marca de 1-5. Terminada la relación con Washington al año siguiente firmaría con Atlanta, pero no pudo cuajar. Se fue a lanzar a Corea y allí le fue mejor.
Intentó con los Dodgers, sin éxito, y entonces durante el verano se dedicó a la liga de México actuando para Aguascalientes y Saltillo.
Mientras tanto, desde el 2010 ingresó a la liga dominicana con el Escogido, que fue su primer equipo. Luego jugó para Licey y finalmente para las Aguilas, donde se ha quedado más tiempo.
En lidom compila marca de serie regular de 29-35, y cuatro anillos de campeón pues había logrado uno anteriormente con el Escogido, en 2009-10.,
“Ha sido una dicha para mí, esta es mi segunda patria y le tengo gran amor a Dominicana”.
Variados
Temas
Sobre Fidel Castro
Yunesky Maya se quedó con una mala impresión de la dictadura de más de 50 años de Fidel Castro.”Mi calificación para Fidel y su gestión es mala. Cuba no ha progresado”.
Albert Pujpls
En su paso por Grandes Ligas, el bateador dominicano más difícil fue Albert Pujols, quien le pegó jonrones en sus dos primeros turnos.
Amigos locales
Estuvo muy cerca de la delegación dominicana en el clásico mundial 2006 pues compartieron el hotel San Juan, en Puerto Rico.