Escogido y Licey no están por confiarse a ser de los Marlins con el COVID-19. Los azules se han sumado a sus compañeros de casa y tendrán a sus jugadores recluidos en dos hoteles, como medida de prevención al coronavirus. Los importados estarán en uno y los nativos en otro.
Los peloteros de las novenas capitaleñas estarán concentrados en estos albergues y saldrán de allí cuando tengan partidos o prácticas. Así lo confirmó ayer a DL el presidente de los Tigres, el doctor Domingo Pichardo.
Sin embargo, al igual que los rojos, no se trata de una burbuja. Habrá un personal con la responsabilidad de asegurarse de que si un pelotero decide salir del hotel se someta a una rigurosa prueba que garantice está libre del virus que ya ha costado la vida a 2,257 personas en el país y más de un millón en el resto del planeta.
Si en el caso hipotético un jugador sale del hotel tendrá que obtener un resultado negativo de una prueba PCR para poder volver a integrarse, lo que puede sacar a ese pelotero al menos por una fecha.
El protocolo diseñado por Salud Pública para la Lidom establece que cada semana los jugadores, técnicos y el resto del personal de cada club tendrá que someterse a una prueba y superarla para poder ingresar al clubhouse y terreno, al menos 75 por equipo.
Antes de cada juego, un equipo médico tendrá que asegurarse que cada integrante tenga la temperatura del cuerpo por debajo de los 30 grados Celcius, además de no presentar síntomas COVID-19.
En la Liga Mexicana del Pacífico, la única del otoño-invierno que ha comenzado, esta semana se canceló la segunda serie a causa del número de casos positivos en un equipo.
El circuito azteca establece que para suspender un encuentro el roster debe tener al menos 14 de los 30 jugadores habilitados. Los Sultanes de Monterrey tenían 21 jugadores que no superaron las pruebas para enfrentar a los Naranjeros de Hermosillo. La semana pasada, los Naranjeros no pudieron jugar con los Tomateros de Culiacán por no poder completar la plantilla.
Tal como ocurría en Grandes Ligas durante la serie regular, las Águilas hospedarán al personal que no reside en Santiago como de costumbre, en hoteles, pero el resto tendrá la libertad de amanecer en sus hogares.
Ángel Ovalles, gerente general del club, informó a DL que el club no se plantea por el momento hacer una burbuja.
Los Toros y Estrellas también hospedarán en hoteles a aquellos jugadores que viven alejados de la sede del club, pero los que pueden desplazarse hasta sus casas tendrán la libertad de hacerlo.
Los campeones cuentan con una serie de jugadores nativos de San Pedro de Macorís, que disputarán la mitad del calendario en el Este del país. Igual caso se da con las Estrellas.
Félix Peguero, director de operaciones de los verdes, confirmó que los paquidermos tampoco tienen planificado hacer “burbuja”.
El presidente de la Lidom, Vitelio Mejía, recibió ayer en su despacho al administrador de Edesur, Milton Morrison, quien informó la empresa distribuidora de electricidad iluminará el estadio Quisqueya.
Morrison informó que de inmediato ordenó a una brigada de técnicos hacer un levantamiento para dar inicio al cambio de bombillas y reparación de la red de alimentación.
Si bien Mejía y Morrison rubricaron un acuerdo, no trascendió si el suministrador del parque hará otra aportación al torneo.
FUENTE: Diario Libre