Santiago. El director general de Migración, Enrique García, consideró difícil la regulación de nacionales haitianos en el plazo de tres meses dado por el Consejo Nacional de Migración, porque un 90 % carece de documentos.
“Los haitianos lamentablemente no tienen documentación en un 90 %, entonces eso nos deja a nosotros con las manos atadas para poder regularizarlos. Es una realidad que nos da de frente, ¿cómo la vamos a resolver? esa es la pregunta del millón, cuando una persona que está produciendo para el país tiene 50 empleados, pero todos son indocumentados, se pone difícil regularizarlos”, expresó.
García se expresó en esos términos durante un encuentro con representantes de la Asociación Dominicana de Cigarros y Tabaco para tratar temas de la gestión migratoria y regularización de sus empleados, donde los exhortó a que traten de conseguir mano de obra que tenga por lo menos pasaporte, que es una persona que se puede tratar de regularizar, porque es el documento principal que se exige.
Mano de obra haitiana
Expresó que este es un problema serio y delicado, porque hay sectores económicos que dependen de la mano de obra haitiana en el 95 %.
“A veces se me acercan personas que me dicen que tienen 20 nacionales haitianos que quieren regularizar, lo primero que le pregunto es si tienen pasaportes y documentos, dicen que no, ¿cómo los regularizo? No hay forma ni aquí ni en Estados Unidos ni en ningún país de regularizar a nadie si no tiene documentación, ese es un problema que presentamos con los nacionales haitianos porque su país lamentablemente no tiene un registro civil”, expresó.
García además destacó el momento delicado que atraviesa el país con el tema haitiano.
Migración dijo no hay censo de ilegales
Enrique García dijo que saber cuántos ilegales hay no es imposible pero sí complicado, porque al día de hoy no hay un registro ni un censo de ilegales. Sostuvo que saben cuántos españoles o venezolanos hay, porque llegan por aire, pero con los haitianos no es posible, porque son 398 kilómetros de frontera, y lamentablemente, vienen por los ríos, por las montañas o montes.
FUENTE: elcaribe